La Carcel

El apacible olor de la humedad de una celda recibe el despertar de Jacobo acompañado de una jaqueca prolongada y brutal. Poco a poco sus pupilas ardidas se acostumbran a la claridad del dia, y logra distinguir las figuras a su alrededor. Su garganta esta seca y adolorida, como si hubiese gritado muchas horas bajo el frio nocturno.

- Bienvenido de vuelta Jacobo. Le he estado esperando, espero que su recuperacion haya sido placentera -. Sonando con tono sarcastico, le habla un hombre en un traje de vestir completamente negro, su camisa y corbata tambien son negras. Tiene unos ojos negros impenetrables, posee una cabellera mas plata q oscura, cabello lacio y corto. Luce muy ordenado.

- Que quiere de mi? -. Pregunta Jacobo mientras se incorpora. Por un instante un subito recuerdo relampaguea en su mente, le hace contraerse levemente y un eco en su cabeza grita: - El tiempo se acaba!-.

El hombre se muestra impavido a pesar de mantener una limpia sonrisa casi bondadosa. Toma un leve respiro y empieza a hablar: - Ya sabes Jacobo, en la Agencia siempre sabemos donde esta cada uno de nuestros miembros. Tu decidiste enfrentar sin autorizacion previa a un demonio Categoria Beta. De inmediato fuimos alertados y tratamos de llegar lo antes posible, pero la policia local ya te habia ofrecido esta hermosa habitacion-. Concluyo el hombre.

Despues de pensar unos instantes, y mirar de reojo el lugar, Jacobo nota que no hay presencia de ningun oficial de policia, y que las demas celdas estan vacias. Mira su reloj timidamente, son las 3:45. Jacobo decide preguntar mas sobre su estado y lo sucedido, pero el hombre se levanta y dice: - El General Vazques necesita que se presente lo antes posible en su oficina. Tienes hasta mañana a las 0300 horas, de lo contrario seras considerado un fugitivo y nos veremos forzados a ir por ti para cancelar tu "contrato"-. Y asi se retira de la celda dejando la puerta abierta.

Jacobo intenta buscar memoria de lo que acontecio, su ultimo recuerdo retrata las gradas de su apartamento y lo que parecia un olor metalico, pero luego todo es un absoluto misterio. Confundido y temeroso, Jacobo se levanta y se dirige a la puerta de celda. Al salir, nota que aun no hay ningun policia presente, asi que camina fuera del area de celdas por sus medios, hasta el area de recepcion, alli su cuerpo le reclama mas descanso, su estomago se retuerce y le obliga a vomitar. Sintiendo que perdera el conocimiento de nuevo Jacobo hace un esfuerzo supremo por caminar al baño en busca de agua, pero subitamente sufre de un mareo y escucha de nuevo la voz en su cabeza, esta vez gritando: - Ya no queda tiempo! ERES MIO! -. Un repentino golpe lo tumba y le deja aturdido y desorientado, un ardor intenso surge en su pecho, Jocobo siente como se esparce por todo su cuerpo, es tan doloroso que no puede hacer sonido alguno, al mirar sus manos con desesperacion nota que esta se recubren de lo que podria decirse una piel de magma. Las fuerzas se recuperan, deja de respirar normalmente y siente como todo a su alrededor empieza a arder y derretirse. Una energia descomunal le embarga y siente un impetu incontrolable de explotar. Jacobo 2 aparece en sus pupilas y finalmente es capaz de emitir un grito triunfal: - AL FIN! -.